Los restos de un hombre y una mujer que fueron cubiertos con hojas de papel de oro para sus lenguas han sido encontrados en las afueras de El Cairo, Egipto.
Los cuerpos, que se encontraron de lado a lado pero en gránulos separados, fueron enterrados en sarcófagos de piedra caliza que datan de hace 2500 años.
Los restos del hombre están bien conservados y sellados en su tótem, y contienen diversos artefactos, como frascos en los que se almacenaban sus órganos preciados, una cicatriz y figurillas de tótem hechas de porcelana. Pero los restos de la mujer no se encuentran en buen estado y hay indicios de que su toto fue abierto por los rotadores.
Las placas de lengua de oro están en buenas condiciones y se encuentran comúnmente en las antiguas ruinas egipcias. Se colocaban en la lengua de los muertos durante el Ƅurial para que el alma pudiera hablar con Osiris en el otro mundo. Se dice que Osiris gobierna el inframundo y juzga las almas de los muertos. Se cree que los muertos podrían persuadir a Osiris con sus lenguas de oro para que tuviera piedad de sus almas.
Los arqueólogos no están seguros de quiénes eran el hombre y la mujer, pero sus dedos se construyeron uno al lado del otro. El cráneo del hombre todavía está bien conservado, con su lengua dorada claramente saliendo de su boca.
Desde que fue enterrado hace miles de años, su tumba no ha sido tocada y todos sus tesoros funerarios han quedado dentro de la tumba. Los arqueólogos encontraron 402 figurillas de UshaƄti hechas de porcelana, una cerámica vidriada con estaño, así como una serie de pequeños amuletos y cabezas verdes junto con los restos del hombre.
Otra мuммy descubierta en febrero también estaba cubierta con una lengua de oro. Los arqueólogos que excavaron en el antiguo sitio egipcio de Taposiris Magna descubrieron 16 tomos en tomos excavados en la roca, uno de los cuales contenía una muéveda con una placa de oro en lugar de una lengua.
Con una antigüedad de unos 2.000 años, los pozos furiales eran populares en la antigüedad griega y romana, manteniendo los restos dentro de una montaña o formación de roca natural.
Había numerosas momias dentro de los tomos, y aunque los restos se han deteriorado desde entonces, las máscaras funerarias de piedra todavía estaban intactas. Permitió al equipo ver cómo era cada persona una vez.
La excavación estuvo a cargo de la Universidad de Santo Domingo, quien ha estado trabajando en el sitio durante casi una década. El esqueleto de lengua dorada se encontró bien conservado ya que gran parte de su cráneo y estructura aún están intactos.
Los arqueólogos lo sacaron de la roca y encontraron el objeto dorado que todavía brillaba dentro de la boca del esqueleto. Creen que la lengua fue extraída de las momias, pero reemplazada por una lengua de oro durante un entierro.