Hace un par de semanas Lola nos mostró una de las fotos más increíbles que he visto nunca de unos padres y sus hijos, que es la misma que encabeza esta entrada. Un padre tumbado en el suelo descansa rodeado (y debajo) de sus seis hijos, todos ellos dormidos, mientras la mamá posa vigilante por si acaso.
Esta gran familia se ha hecho famosa por esta imagen y famosa también porque a raíz de su publicación la pareja consiguió una donación de 250.000 dólares (180.000 euros) para gastar en una gran superficie y una luna de miel en Las Vegas.
Pudiera parecer que con ese dinero tienen la vida resuelta, y la verdad es que seguro que les soluciona mucho la crianza de sus hijos, sin embargo hay algo que es inamovible, el tiempo, y me pareció curioso calcular el tiempo que los padres pueden llegar a gastar en hacer las cosas más cotidianas, teniendo en cuenta que, por ejemplo, gastan 52 pañales al día y cerca de cuatro horas en ponerlos.
Necesidad de eliminación
Cambiar un pañal con “pipí” se hace en aproximadamente 2-3 minutos (quitar ropita, retirar pañal, limpiar un poco con una toallita, poner pañal y poner ropita). Si calculamos que cada niño debe gastar unos 3 pañales diarios sólo de pipí (el resto tendrá también caca), multiplicado por 6 niños, nos dan unos 18 pañales de pipí que, multiplicados por 3 minutos (calculo 3 en vez de dos, porque en algún cambio resulta que ha habido un escape y hay que cambiar la ropita), nos muestran que sólo en cambiar pañales de pipí esta familia gasta 54 minutos.
Cambiar un pañal con caca se hace aproximadamente en 5 minutos (unas veces más unas menos, unas veces será poca caca, otras veces se pondrá de caca hasta la espalda, así que 5 minutos de media me parece razonable). Un bebé de pocas semanas hace unas 6 cacas diarias. Si calculamos que cada niño mancha 6 pañales al día, multiplicado por los 5 minutos que se tarda en cambiar cada pañal (da 30 minutos) y multiplicado por los 6 hijos que tienen, tenemos que los padres pasan 180 minutos de su tiempo diario cambiando pañales con caquita.
Estas 3 horas, sumadas a los 54 minutos de los pañales con pipí, nos dan 3 horas y 54 minutos para cambiar 52 pañales de bebé.
Necesidad de alimentación
Los seis bebés toman leche artificial, así que todos toman biberones que deben ser preparados antes de su consumo. Para preparar un biberón hay que lavarse las manos, poner a hervir agua un minuto y dejarla llegar a temperatura ambiente para luego añadir el polvo y conseguir la mezcla. Esto da de media unos 5 minutos por biberón, aunque como seguramente prepararán más de uno a la vez (poniendo más cantidad de agua a hervir y todo hecho en el mismo momento), podríamos dejarlo en 4 minutos. Sin embargo los biberones hay que lavarlos después concienzudamente o bien esterilizarlos (yo me quedo, en los países desarrollados, con la primera opción), así que creo que podemos añadir perfectamente un minuto más por biberón, dejando el resultado final en 5 minutos.
Un bebé de pocas semanas come cada 2 horas y media / 3 horas. Esto hace que tome unos 8-10 biberones al día, así que nos quedaremos con 9. Seis bebés a 9 biberones por día nos da un total de 54 biberones que deben prepararse. Si multiplicamos los biberones por los 5 minutos que se tarda en prepararlos tenemos que esta pareja gasta cada día 270 minutos (4 horas y media) en preparar biberones.
Como los biberones, además de ser preparados, deben ser ingeridos y los bebés necesitan a alguien que se lo de, calculamos el tiempo que un bebé de pocas semanas puede tardar en tomarse un biberón, y entre que se lo toma, regurgita un poco, se detiene, se adormece, sigue comiendo y echa el eructo pueden pasar tranquilamente 10 minutos.
Si multiplicamos los 54 biberones que se toman los sextillizos cada día por 10 minutos obtenemos que esta pareja gasta cada día 540 minutos (9 horas) en dar de comer a sus hijos.
Necesidad de dormir
Los bebés de pocos días hacen poquitas cosas. La mayoría comen y duermen, nada más, así que optaremos por pensar que los sextillizos hacen los mismo. Si hemos calculado que toman 9 biberones al día debemos calcular que, después de comer, deben dormirse 9 veces al día.
La mayoría de los bebés se quedan dormidos mientras comen, o justo después de la toma, sin embargo tardan un poquito en entrar en un sueño profundo tal que puedas dejarlos en una cuna o moisés sin que se despierten al instante. Este tiempo es de aproximadamente 15 minutos (a veces es más) que, multiplicado por las 9 veces que duerme cada niño nos da un total de 135 minutos por niño, que multiplicado por los seis niños nos da que esta pareja gasta 810 minutos (13 horas y media) del día en mecer o contener a sus hijos tras haberse dormido para luego pasarlos a una cuna o minicuna.
Y en total…
Faltaría todavía bañarles, ponerles crema, pasearles un ratito por la calle para que vayan sintetizando vitamina D, cogerlos en brazos algún ratito para ir haciendo vínculo y para calmar los llantos cuando no duermen, lavar la ropa, tenderla o ponerla a secar, recogerla y doblarla, poner los pijamitas por la noche y poner la ropita por la mañana para hacer un cálculo real fidedigno del tiempo que estos papás pasan cuidando de sus seis hijos.
Sin embargo con las tres necesidades de las que hemos hablado creo que es suficiente para hacernos una idea de lo que puede suponer tener seis hijos de golpe.
Hemos dicho que esta familia gasta 3 horas y 54 minutos en cambiar pañales, 4 horas y media en prepara biberones y 9 horas en dárselos, además de 13 horas y media en dormirlos. Sumando todas estas horas obtenemos que en sólo tres necesidades básicas seis bebés necesitan 30 horas y 54 minutos del tiempo de sus padres.
De esto se concluye que o alguien les hecha cien manos con los niños, o a esta pareja la veremos pronto con serios problemas psicológicos.